Prensa
Andina
El Secretario del Senado, Gregorio Eljach Pacheco,
es un burócrata profesional, que aprendió el arte el manejo oscuro de la
política, a moverse en sus aguas sinuosas y manipular al legislativo hasta
alcanzar un poder que ni siquiera tienen algunos congresistas.
Maneja a su antojo las sesiones del Senado, Es
quien llama a lista y resuelve si hay o no quórum para deliberar o decidir en
las plenarias y muy sutilmente sugiere a los presidentes las decisiones a
adoptar frente a las ponencias, los proyectos y hasta en la manera de proceder
en algunos actos, amén de la influcencia en todos los actos administrativos del
Congreso.
Recordemos la ceremonia de instalación del Congreso
el 20 de julio de 2019, cuando por su insinuación, Ernesto Macías, le hizo la “jugadita”
a la oposición para no dejarlos hablar, luego de la alocución de Iván Duque,
siendo el derecho de réplica un recurso constitucional.
Es tal el poder que acumulan –torciéndole el
pescuezo a la ley, haciendo triquiñuelas y tráfico de influencias no solo en el
mismo congreso sino en despachos importantes del gobierno y organismos de
control e investigación-, que muchos secretarios han creído que pueden llegar a
ser presidentes de la República.
El actual secretario, -quien ya cumplió ocho años
consecutivos en el cargo, aspira ahora a ser tomado en cuenta por el Consejo de
Estado como uno de sus candidatos a ocupar un lugar en la terna para la
Procuraduría General de La Nación. Él se ha negado a renunciar como lo sugirió
la Corporación de Excelencia en la Justicia, para que todos los candidatos
quedaran en pie de igualdad frente a la escogencia.
Eljach Pacheco, hizo caso omiso a la insinuación de
la CEJ y por el contrario, resolvió tacar a tres bandas, por si acaso.
La primera “jugadita” es permanecer en el listado solicitado
de candidatos del Consejo de Estado, de tal manera que pueda ser reelegido el
20 de julio como secretario, razón por la cual no renunció y para lo cual ya
tiene listas las mayorías en el Senado.
Los candidatos en la competencia por los dos años
que restan de vigencia al Congreso actual son: Juan Gregorio Eljach Pacheco (C.C.
No. 10540910); Juan Pablo García Peñaloza (C.C. No. 14238683); Mauricio Andrés
Acosta Vallejo (C.C. No. 80769651); Diego Alejandro González González
(79914181); Ana Feliz Romero Aranzazu (C.C. No. 28738608).
Es de anotar que según los acuerdos suscritos desde
hace dos años, la filiación del nuevo funcionario debe corresponder al Partido
de la U.
La segunda “jugadita” es que lo elijan Procurador,
para lo cual, entonces sí renunciaría al cargo, aunque la posesión del Jefe del
Ministerio Público, se realiza en Enero, a partir de lo cual se contabilizan
los cuatro años del período.
La tercera “jugadita” consiste en colocar entre los
candidatos a Secretario General (lo cual ya hizo) a su “amigo del alma” Diego
Alejandro González, actual secretario de la Comisión Segunda del Senado, quien
también tendría buena opción de reemplazarlo y de esa manera desde el propio
Congreso, seguiría influyendo ante las altas cortes, para que su nombre sea
incluido en la terna.
Para ello, igualmente influyen algunos reporteros
que cubren la fuente del Congreso, y a quienes Eljach Pacheco, los tiene en la
palma de su mano, con cargos para sus familiares en la nómina del Senado, las
UTL de algunos congresistas y en otras entidades del Estado.
Con todo ese manejo es que aspira a quedar como
Procurador y como premio de consolación la misma Secretaría del Senado de la
República; y si no, pues también dicen
por ahí que Aujrelio Iragorri su padrino político, lo ubicaría en las listas
por el Partido de la U. para las próximas elecciones.